El sábado pasado, o el domingo, no recuerdo con exactitud,
tenía la radio conectada y hablaban de Federico García Lorca. Escuché, sin
estar prestando mucha atención, por primera vez en mi vida el nombre de Juan
Ramírez de Lucas.
Se hablaba, en el programa que estaban emitiendo, de que
García Lorca hubiese podido marcharse de España pero no estaba dispuesto a
hacerlo si no lo acompañaba esa persona.
Como sentí curiosidad por saber quién era tecleé en Internet
y ahí encontré bastante información al respecto.
http://www.clarin.com/sociedad/conocio-nombre-Garcia-Lorca-despues_0_698330381.html
http://www.abc.es/20120904/cultura-libros/abci-garcia-lorca-amantes-sonetos-201209031950.html
Y más enlaces que, bastante asqueada, no quise ya ni mirar.
http://www.abc.es/20120904/cultura-libros/abci-garcia-lorca-amantes-sonetos-201209031950.html
Y más enlaces que, bastante asqueada, no quise ya ni mirar.
También me enteré, escuchando ese programa, que alguien cuyo
nombre es Manuel Francisco Reina — que dentro de la poca atención que
estaba yo prestando creo que era el entrevistado —ha escrito recientemente una
novela acerca de esa historia y de esos “amores”.
¿Por qué asqueada?
Por varias cosas.
Una de ellas porque a cuenta de una historia que sólo debiera
concernir a quienes la vivieron — si en verdad la vivieron — las dos familias,
la de García Lorca y la de Ramírez de Lucas, tratan de lucrarse aireando (envolviéndolo
en un cierto halo de romanticismo) miserias que, parece ser, están presentes en
toda condición humana, incluso en la de los poetas más insignes y ensalzados.
Otra de las razones por las que siento repugnancia por este
asunto es que ese señor, Ramírez de Lucas, guardó (con muy buen criterio, por
otra parte) absoluto secreto acerca de esa relación, pero, por quién sabe qué motivos,
antes de morir en 2010 se sinceró con una hermana suya que es, según he leído
en alguno de los múltiples artículos publicados, quien ha dado a conocer cartas
y la existencia de recuerdos que Ramírez de Lucas conservaba de aquella
relación.
¿Por qué lo airea? Parece ser que por dar a conocer
circunstancias que rodearon a la muerte de García Lorca, pero ¿qué sentido
tiene ahondar en eso?, me pregunto.
Y me surge la sospecha de si no hay mucho de morbo en el
asunto.
Por otra parte leo también que García Lorca pudo marcharse
de España, y evitar ser asesinado, pero que no quiso porque no estaba dispuesto
a separarse de su amado.
¿Por qué no podía separarse de su amado?
Él corría peligro, sí, pero no lo corría Ramírez de Lucas ya
que pertenecía a una familia “conservadora” que no tenía nada que temer. Luego
el interés de García Lorca al pretender llevarlo con él no era salvarlo de nada
sino, nada más, no prescindir de su compañía…
¿Por qué le era tan “necesario”?
Por otra parte Ramírez de Lucas tenía 19 años y Lorca 38.
Ramírez de Lucas quería ser actor y García Lorca le aseguró que él lograría que
lo fuese.
¿Seguro que era amor, y sólo amor, lo que alentaba a Ramírez
de Lucas en esa relación?
Otra cosa. Según la información que ha trascendido García
Lorca esperó, sin resultado, a que Ramírez de Lucas obtuviese el permiso que
éste solicitaría de su familia para que pudiera acompañarlo en su huida a
Méjico. Pero ese permiso no fue dado jamás.
¿Solicitaría Ramírez de Lucas el tal permiso a sus padres?
Todo lo que ha trascendido es versión de Ramírez de Lucas, y
cabe preguntarse si las cosas son como él las contó a su hermana.
En cuanto al propio García Lorca, vuelvo a preguntarme,
¿cómo era y qué matiz tenía su amor hacia el jovencito?
¿Era amor o era mera atracción sexual?
Los homosexuales suelen ser proclives a una sexualidad mucho
más “apasionada”, más carnal de la que pueda darse entre heterosexuales. Así
que, no se quería marchar sin él… por qué.
Me siento inclinada a pensar que porque estaba bastante “enganchado”
al “objeto de su deseo”. Y poco más.
Por añadidura Ramírez de Lucas no aparece reflejado en los
artículos que he podido leer como un dechado de dignidad ya que “para lavar su
pasado” se alistó en la División Azul.
¿Por qué tenía que lavar ningún pasado?
Y, luego, setenta años después, sale con toda esa historia.
Y tanto su familia como la de Lorca parecen bastante entusiasmadas
con que se divulgue.
¿Por qué? ¿Por dinero?
Y el escritor de la novela, Manuel Francisco Reina. Pues me tomo la libertad de pensar que también por dinero.
Todo bastante sórdido. Tanto la historia en sí como los
intereses que, a juzgar por las apariencias, mueven a los interesados en
difundirla.Y el escritor de la novela, Manuel Francisco Reina. Pues me tomo la libertad de pensar que también por dinero.
Más tarde sigo mariposeando por internet y aparecen unos cuantos individuos (ninguna individua) que fueron el "ultimo amor" del poeta.
A todos ellos dedicó poemas, en todos ellos se inspiró, todos ellos guardan cartas de amor y recuerdos, de todos hay algún biógrafo aseverando que era con quien de verdad quería huir a Méjico.
En fin...
Alicia Bermúdez
Alta en el Cielo Azul un Ala27 mayo, 2013
Bermúdez, Alice: No nos desilusiones con ese final terrorífico de no saber que es lo que escribes porque el rectángulo no da para más, siendo por supuesto cosa matemático geométrica precisa. Ya sabemos que todo lo es, y también que los sabios e investigadores se ocupan de hacernos conocer a los que nos dedicamos a las artes con alma (¿?), la otra parte del asunto, cosa que al final nos hacen explicatoria y entendedora, aunque no entre en todos los DIN -A4 del mundo.
Eso que del alma anda en nuestro cuerpo, aunque para algunos afuera, es cosa sabida por vieja y remanida, aunque no te lo creas del todo. Hace también largos siglos que los sabios explicaron, más o menos, que pasaba con eso que decían alma y por dónde andaba, y algunos casi lo acertaron. Hasta las religiones se ocuparon de ello con el mismo sentido antiguo de los sabios, porque todos nosotros, a la hora de soltar esa expresión de que “me duele en el Alma”, sospechamos por donde anda la tía. O sea justo por el externon, para simplificar, cosa que la mayoría confunde con el corazón que está cerquita y porque te da un colocón de estremecimiento cuando a uno se le da por “almacionarse”.
Hay, religiones, creencias y ciencias intersticiales, que lo explicaron a la perfección, y otras, las oficiales, que juegan al mareo. No te dejas engañar, hay mucha gente que sabe para qué y donde está el alma, lo malo es que mucha otra ni se entera que la tiene porque se lo han contado fatal.
En realidad el alma anda por todos lados dentro de nosotros, porque para eso es etérea y compuesta de otras eteridades que nos habitan, pero lo cierto es que cuando se organizan, se ponen de acuerdo y se deciden, nos dan un golpe inerior de verdad, para que te enteres de lo que vale un peine, vital, por supuesto.
Por cierto, éste rectángulo sí que se me ha quedado chico. Bueno, lo demás te lo explicas tú misma que para eso estas.
Te entiendo perfectamente Alicia, en lo del recuadrito jejej, no, es broma. Entiendo que encuentres tanta información sofisticada de lo que comunmente llamamos ciencia alejada de tus sentimientos e inquietudes primordiales. Pero es que nos han enseñado mal como dice “Alta en el Cielo Azul un Ala”, nos han enseñado a fraccionarnos como si en la carne no hubiera misterio redentor o en el alma ciencia que desarrollar. Jugar a ésto es hacer lo que el autor dice con Genetistas y Proteinistas, es confrontar dos partes de una misma naturaleza que deben entenderse ,tendiendose lazos recíprocos hacia una plenitud mayor.
Lo unico es que no se puede intentar entender profundamente lo científico sin una actitud científica, y me explico, no podemos intentar entender lo cientifíco como información pasiva, como un mero acto de deglución intelectual. Hay que propiciar una intención de asimilación de los conceptos para buscar los misterios que ampara lo que la ciencia nos ofrece, somos nosotros los que debemos convertirnos en científicos de nuestra propia experiencia de vida. Los kilos de información se vuelven inertes sino los conviertes en aventura cuando pasan por ti.
Un abrazo.